Las webs de los 90 más míticas vistas en 2017. Que sí, créetelo, que esto existió

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Qué rápido pasa el tiempo, diría el nostálgico. Mirar las huellas de la vieja Internet es como ir a casa de los abuelos y pasarse la tarde revisando fotos de la infancia. No todo ha sobrevivido, pero lo que ha perdurado nos recuerda dos cosas: que éramos unos horteras… y que no nos importaba serlo.

Gracias a proyectos como Internet Archive podemos rastrear todos aquellos gifs a bajísima resolución, las tonterías que decíamos en nuestros primeros blogs y foros de Melodysoft, el site que diseñamos para nuestro padre como práctica del instituto, o la recopilación de contadores de visitas y relojes internacionales que añadíamos con el mimo criterio que el de niños de dos años garabateando pareces.

¿Te apetece un viaje al pasado? Venga: a donde vamos no necesitamos carreteras.

Información en tiempo real

Tener Internet en casa, en 1998, era tener una ventana a la actualidad más rabiosa, enterarse de las «breaking news» al mismo instante de ser publicadas. Si tenías un compañero listillo en clase o en el puesto de trabajo era porque Internet se lo había contado todo.

Los principales periódicos internacionales comenzaron su andadura digital en los 90. El New York Times comenzó en 1995, el New Yorker en el 98, BBC News en 1997 y The Telegraph antes aún, a mediados de 1994. Muchas de aquellas portadas son imposibles de visitar pero todavía se conservan bastantes “pantallazos” de los primeros años.

Y varias webs de la época siguen operativas, como la de la campaña presidencial de Bob Dole y Jack Kemp.

Mientras, en España

Los medios nacionales tampoco pensaban quedarse atrás... o sí. En los 90, El País aún ni había comprado el dominio web.

Izquierda: elpais.com en febrero de 2000 (sí, el dominio aún pertenecía a otra web). Derecha: Marca en 1998.

No eras nadie sin tu firma

Este caprichito fue algo más tardío, hacia finales de los 90, pero estaba claro que si querías dejar huella en un foro, tu firma tenía que llamar la atención popular. Para ello existían decenas de editores: de fondos, fuentes, estilos, animados, con motivos de tus series de televisión favoritas, etcétera. Y los que añadían purpurina sobre cualquier superficie.

Podías encontrar firmas de Las tortugas Ninja y, a renglón seguido, de Alf, Buffy Cazavampiros, Expediente X o de los rostros protagonistas de la serie Beverly Hills, 90210.

Una odisea de fotos a baja resolución, perfiles con dientes de sierra y tipografías sin el menor sentido estético.

Todo estaba en obras

Siempre.

Todo el rato.

Durante años.

Ser Web Design Consultant en 1996

Porque no era fácil estar a la altura de los maestros del gif, y sólo unos pocos dominaban el noble arte del diseño con mosaico de gatos blancos.

Los contadores de visitas

Lo que nos lleva al núcleo del asunto: ¿cuánta gente visitaba nuestra web?

Aaddzz comenzó a ofrecer esta herramienta en octubre de 1998. Ahora ya no funcionan. Google Analytics los mató a todos.

Y el mercadillo del politono

Los mejores politonos en tu móvil, el chiste del día, el horóscopo, el salvapantallas de la NASA o el fondo de escritorio de Diablo, tomado directamente de una captura para tu fantástico monitor CRT de 640×360 píxeles de resolución.

Así sería Xataka en 1996

Aquel pasado era, a su vez, un futuro remoto y distópico donde queríamos diferenciarnos del resto.

Y nos maravillábamos con cualquier tontería. Cada cambio en la interfaz del escritorio era un salto al vacío, una transformación gigante. Tal vez los recursos eran limitados —excepto en Age of Empires II, ahí podíamos usar trucos— pero no nuestra capacidad de sorprendernos.

El fenómeno fan más loco

Surgieron como champiñones miles de páginas alrededor de los grupos, cantantes, actores, etcétera. El culto al famoso en fansites con estética de obituario.

¿Qué pasaba con el amarillo?

¿Te suena de algo GeoCities? Fue uno de los primeros servicios de hosting del Internet moderno. Podías crear una web y, según el contenido, te asignaban un “barrio” o una ciudad. De hecho, GeoCities empezó llamándose Beverly Hills Internet (BHI).

Para evitar que un usuario malintencionado clonara tu página, en GeoCities implementaban una marca de agua en forma de gif. A veces tapaba el propio logo de la empresa. Un cachondeo. El caso es que hacia 1997, cuando este servicio era uno de los tres más visitados de todo Internet con 40 millones de usuarios, muchas webs optaron por diferenciarse del resto con colores chillones. Y no un azul intenso, no. Amarillo.

El amarillo se transformó en un sello de identidad. ¿Te gustaría saber cómo sería tu página favorita vestida de amarillo? Aquí tienes un «geocitisizer». ¿Has sufrido ya los horrores del tiempo? Con eso convivíamos todos los días.

Firma mi libro

Y las cartas perfumadas, y las agendas con dedicatorias y... ains. Todo esto se ha perdido como lágrimas en la lluvia.

No estamos solos, adopta tu OVNI

La ufología se enfrentó a la etapa más creativa de su carrera.

A juzgar por la cantidad de webs y artículos especializados, el contacto alienígena era inminente. El año 2000 lo cambiaría todo. En el Área 51 escondían algo, estábamos seguros. El Pentágono no quería decirnos la verdad, pero podíamos intuirlo.

Warner Bros, no cambies nunca

Por algunas webs, el tiempo se ha congelado. Warner era una de esas grandes distribuidoras que potenciaba las campañas de algún producto con una web temática exclusiva.

Lo mejor de todo es que aún puedes pasearte por su Parque Jurásico, por el Salvaje Oeste o por la constelación de Space Jam. Igual todavía tienes un email de alguna de sus páginas.

Amazon, tú tampoco

Captura del 28 de agosto de 1999

El perfecto ejemplo de «si algo funciona, no lo toques». ¿Será esta la razón del éxito internacional de Amazon?

The Macarena Dance

No, tampoco nos olvidemos de este hit que 'Los del Río' pusieron patas arriba en 1993 y, desde entonces, es objeto de imitación hasta por el mismísimo Garfield.

Enemigos declarados

Aunque no todo era fiesta y diversión.

Odiar a Bill Gates fue una de esas modas temporales a las que todo el mundo pertenecía, como creerse miembro de los Power Rangers o pertenecer al santuario de los Caballeros del Zodiaco.

Y la razón por la que todo el mundo denostaba al maestro de la informática y las finanzas no era sino por su navegador. ¿Sigues usando Internet Explorer? Entonces mereces visitar esta página. ¿Quién quiere usar Explorer pudiendo usar Netscape? Que, por cierto, aún funciona.

Esto era un sitio hot y top semanal en 1996

Servicio DJ para bodas, cumpleaños, bar mitzvah y fiestas de guardar. No teníamos LastFM, ni Spotify, ni nada que se le parezca. Pero teníamos EMBAJADORES DEL TECNO.

Sus premios:

• "YAHOO....Selected this Site as a "Site of the Week" for the week of 09/02/96".
• "CNN....picked this Site as a "Hot" sight to learn the Macarena".

Chateando, que es gerundio

Algún que otro sociólogo dirá que los primitivos chats fueron un método de aprendizaje capital para toda una generación, aquella que se enfrentaba a AOL Instant Messenger (lanzado en mayo de 1997) y a los servicios de mensajería instantánea por primera vez. Ya no había que pagar costosas conferencias a distancia: podíamos hablar con quien quisiéramos, de cualquier punto geográfico.

Los chats de los buscadores Terra, Olé, Dónde, Ozú, MSN y demás pozos juveniles, sustituyeron al tradicional sistema de carteo entre amigos de campamento.

Por fin podíamos quedar a una hora concreta y conversar con ese amigo que conocimos en Andorra o aquellos amigos de intercambio de los que nunca más volvimos a saber nada. No te sientas viejo, aún queda Twitter, Snapchat, Twitch, WhatsApp, Telegram… por opciones no será.

Ahora bien, ninguno será mejor que los tiempos del programa IRC, eso toca asumirlo.

De vuelta a la actualidad

Hay quien todavía sueña en ComicSans. Estas aristas tienen algo mágico, son pequeños mensajes en una botella, protegidos. Y, aunque el tiempo pasa por todos, algunos serán recordados más allá de su época. Eso sí, con algún que otro cambio. Renovarse o morir.

A los usuarios tal vez nos escaman esas transformaciones radicales que viven algunas webs, pero un departamento de diseño sabe lo que hace. Sólo hay que fijarse en el nuevo ZenBook 3: conserva las líneas de los primeros modelos presentados hace ya seis años, pero han vivido un completo cambio interno.

El Zenbook 3 de ASUS ha logrado ensamblar en un perfil de apenas 11,9 milímetros y poco más de 900 gramos de peso un sistema puntero tanto gráfica como energéticamente. Además cuenta con una pantalla superresistente Corning Gorilla Glass. Disponible en tres colores (oro rosa, azul real y gris cuarzo), este ultrabook supone la evolución última de un diseño limpio y funcional.

A nuestras viejas webs favoritas les faltaba un interiorista, desde luego. Pero marcaron nuestro devenir en la red. Ya son parte de nosotros, aunque nos cueste reconocerlo.

Da igual la resolución a la que chateáramos, en nuestro recuerdo permanece el sentimiento de descubrimiento de quién sabía que estaba ante algo grande, algo que acababa de empezar y con un enorme margen de crecimiento.

Ah, sí, pulsa este botón. Te queda mucho por ver.

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