TECNOLOGIA, TABLETS Y MOVILES: La explicación definitiva del 5G solo podía hacerse de una forma: con memes

La explicación definitiva del 5G solo podía hacerse de una forma: con memes

El 5G ha dado para escribir ríos y ríos de tinta (digital, en nuestro caso). Lo hemos explicado en profundidad, hemos comparado las dos fases de su despliegue, lo hemos probado durante dos semanas, incluso lo hemos explicado en nuestro Xataka Live jugando a "Tabú", pero en esta ocasión hemos querido ir un poco más allá para explicar el 5G usando memes.

La idea de este artículo es que sea estrictamente visual. Para ello, hemos creado una colección de 30 memes que explican desde los conceptos más básicos del 5G hasta lo que supone (y supondrá) cuando se implante definitivamente. Debajo de cada foto habrá una pequeña explicación para dar algo más de contexto, porque puede parecer fácil, pero no es sencillo explicar lo que supone la banda de 700 Mhz usando un meme. Dicho esto, comencemos.

El 5G llegó a nuestras fronteras en verano de 2019, cuando Vodafone, que es la única operadora que lo ofrece actualmente, anunció que lo desplegaría en algunas ciudades españolas. Desde entonces, se han escrito infinidad de artículos abordando esta nueva tecnología.

Aunque realmente no tenemos una versión final del 5G, sino que tenemos lo que se conoce como 5G NSA.

Porque sí, el 5G se está desplegando en dos fases: una primera de transición llamada 5G NSA (siglas de Non-Stand Alone) y una segunda, que será la final, llamada 5G SA (siglas de Stand Alone).

El 5G NSA está construido sobre la infraestructura del 4G+. Eso significa que permite conseguir una mayor velocidad y menor latencia ofreciendo mayor capacidad de red.

Porque el 5G requiere del despliegue de ciertas tecnologías que todavía no están listas, como las antenas o los repetidores que tendrán que colocarse por toda la ciudad para llevar el 5G a cada rincón. Mientras eso llega, se usa la infraestructura del 4G+ con algunas modificaciones.

Para que nos hagamos una idea, el 4G+ es capaz de conseguir hasta 1 Gbps de velocidad de bajada y 30 ms de latencia. Con el 5G NSA se sube la velocidad a 2 Gbps y la latencia se reduce hasta los 10 ms, siempre sobre el papel. No está mal, pero no es ni de lejos lo que podremos conseguir cuando llegue el 5G SA.

Con el 5G SA, y siempre atendiendo a los estándares, aspiramos a conseguir una velocidad de descarga de hasta 20 Gbps por segundo y una latencia de entre uno y dos milisegundos gracias a tecnologías como Edge Computing, que permite llevar los servidores de los servicios justo al lado de las antenas para reducir la latencia al mínimo.

Precisamente porque el 5G está a medio camino, operadoras como Telefónica, Orange y MásMóvil han preferido esperar hasta el año que viene para lanzar el 5G.

Entre la infraestructura que España debe desplegar para que llegue el 5G SA están los sistemas distribuidos de antenas (DAS) con small cells, que es una red de antenas con capacidad para ofrecer servicio a muchas personas. En lugar de haber unas cuantas antenas grandes para muchas personas, habrá muchas antenas de menor tamaño dedicadas a menos personas, lo que reduce la saturación. También se debe llevar la fibra óptica a las antenas (lo que se conoce como FTTA) e implementar Edge Computing que, como decíamos, consiste en llevar los servidores de los servicios cerca de las antenas.

El 5G NSA usa la banda de 3,7 GHz, que tiene mucha capacidad de red pero un problema importante: no penetra bien las paredes. Por eso en las ciudades con 5G como Madrid o Málaga solo se puede usar en la calle.

Por el momento, las paredes le han ganado la batalla al 5G, pero la solución está en camino de la mano del Segundo Dividendo Digital.

El 5G NSA solo está disponible en Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Málaga, Zaragoza, Bilbao, Vitoria, San Sebastián, Coruña, Vigo, Gijón, Pamplona, Logroño y Santander, y solo en determinadas zonas, así que todavía falta para que sea una tecnología masiva.

Para que el despliegue del 5G pueda llevarse a cabo es capital contar con la banda de 700 Mhz, que es la que actualmente usa la TDT. Esta banda está muy extendida por nuestro territorio y, efectivamente, penetra bien las paredes. Hasta que la banda de 700 MHz no se libere el 5G SA no podrá llegar.

El proceso de resintonización ha comenzado ya y se está llevando a cabo por fases. La TDT pasará a emitirse en las bandas de frecuencia 470-694 MHz y para resintonizar las antenas hay que contactar con una empresa instaladora autorizada. Aquí tienes más información sobre qué edificios deben llevar a cabo el proceso y cómo solicitar las ayudas.

Las operadoras españolas deben pujar en subasta pública para conseguir parte del espectro de la banda de 700 MHz. La subasta se llevará a cabo a principios de 2020, ya que el Segundo Dividendo Digital, siguiendo las guías de la Unión Europea, contempla que la banda de 700 MHz debe liberarse antes de junio de 2020.

Se espera que las pujas por la banda de 700 Mhz genere un total de 1.410 millones de euros para las arcas del Estado.

Si todo va como es debido, para finales de 2020 o principios de 2021 debería llegar el 5G SA, la versión final, que traerá una mayor velocidad de descarga y una menor latencia.

Y aunque pueda parecer que el 5G será un cambio radical en la forma en la que usamos el móvil, lo cierto es que realmente es una red pensada para la industria.

Los casos de uso del 5G aplicados en nuestro día a día son complicados de predecir, ya que el 5G permitirá conectar cosas que actualmente no sabemos que podemos conectar. Ha habido algunas pruebas ya, pero para conocer todo el potencial del 5G tendremos que esperar a que se asiente y se investiguen sus posibles usos.

Un caso de uso fácil de ver serían los coches 100% autónomos. Para que estos coches funcionen sin problema deben estar conectados no solo entre sí, sino con el resto de elementos de las carreteras y ciudades, ya que solo así podrán conocer el estado real de la calzada para, por ejemplo, predecir accidentes. Dicha conexión debe ejecutarse sin latencia, ya que cuando conducimos, un retardo más elevado de la cuenta puede suponer la diferencia entre que el coche evite un obstáculo o se estrelle contra él.

En definitiva, el 5G será la conexión de las cosas, de los coches, de las fábricas, de los robots... Porque una de las claves del 5G es que tiene mayor capacidad de red, y es algo que está pensado para conectar no solo los dispositivos que tenemos conectados actualmente, sino todos los que están por venir en el sector del Internet of Things, por ejemplo.

Así que los usuarios de a pie no vamos a notarlo demasiado, al menos si seguimos usando el móvil como lo usamos hoy en día.

Eso no quiere decir que no tenga potencial en nuestras vidas. Por ejemplo, y siempre sobre el papel, el 5G nos podría permitir jugar a servicios como Google Stadia o Project xCloud sin latencia usando la red móvil. Además, algunos servicios como Amazon Prime Video o Hatch están optimizados para 5G, así que cabe esperar que cuando la red se implante otros servicios hagan lo mismo.

Evidentemente, para aprovechar el 5G en tareas pesadas como consumir contenido multimedia o jugar en streaming será necesario que las tarifas de datos aumenten su capacidad. Actualmente, solo Vodafone ofrece una tarifa de datos ilimitadas que, por cierto, fue con la que estrenó la red 5G NSA.

Sobra decir que para poder usar la red 5G es necesario tener un móvil 5G. Un móvil 4G no es compatible, así que tocará renovar el teléfono cuando queramos empezar a probar esta red de última generación.

Lo que permite a un móvil conectarse al 5G es el módem, y no todos los módem 5G son compatibles con el 5G NSA y 5G SA. Por ejemplo, el Snapdragon X50, que es el más común en los móviles 5G lanzados en 2019, solo es compatible con 5G NSA.

Pues eso, si te has comprado un móvil 4G en el Black Friday o tienes pensado hacerlo en Navidad, que sepas que el 5G es una red que no podrás aprovechar.

De hecho, es normal que hayas comprado un móvil 4G, ya que los compatibles con la red 5G se cuentan con los dedos de una mano y, en términos generales, suelen ser más caros que sus homólogos 4G. Todavía no hay una oferta de terminales muy elevada, pero se espera que en 2020 la cantidad de móviles 5G aumente exponencialmente.

El 5G ya es una realidad y es cuestión de tiempo que se implante. Los tiempos avanzan rápido, porque cualquiera diría que fue ayer cuando llegó el 4G a España allá por 2013, pero por si fuera poco, en China ya hay laboratorios estudiando el 6G. Todavía le quedan mínimo 10 años de recorrido y se espera que consiga velocidades de hasta 1 Tbps, pero tiempo al tiempo.

En resumen, el 5G llegará para ofrecer más velocidad (hasta 20 Gbps), menos latencia (entre uno y dos milisegundos) y mayor capacidad de red (hasta un millón de dispositivos conectados por kilómetro cuadrado). Ahora mismo se encuentra en la primera fase, 5G NSA, y para que llegue el 5G SA será necesario liberar la banda de 700 MHz e invertir en infraestructura.