Escribo esto tras ver en las noticias que "el bitcoin pierde más del 30% de valor en su peor semana desde 2013". Estamos ya más que acostumbrados a oír que el bitcoin se desploma y se dispara. Normalmente, una inversión con este grado de volatilidad sólo la asumen especuladores muy expertos y sin embargo en mi entorno conozco a mucha gente que está invirtiendo en bitcoin. A nivel global se están escuchando cosas alarmantes que deberían preocupara a los reguladores.
¿Por qué mucha gente invierte en bitcoin? Dejando a un lado los especuladores a corto, los inversores a largo creen que el bitcoin en el futuro será el medio de intercambio universal y el depósito de valor que sustituirá a dólar, euro, etc. Vamos por partes.
Bitcoin no puede ser un medio de intercambio universal
Bitcoin y su tecnología trajo la promesa de tener un medio de intercambio anónimo y sin intermediarios. En realidad esto ya existe: pagar en metálico. La ventaja de pagar con criptomoneda sería que hiciera más fácil pagar a distancia. Sin embargo en el mundo real comprar algo con bitcoin o transferir fondos - por ejemplo a un familiar en otro país - no es para nada sencillo. No hay ninguna app que lo haga fácil a pesar de que muchas startups están intentándolo. Y aunque llegara a ser usable, las comisiones son tan altas que no merecería la pena. Usarlo para mandar dinero a otro país y cambiarlo por moneda tradicional usando un cajero bitcoin puede llegar a costar un 15% de comisión entre emisión y retirada.
A su vez, si no lo usamos para comprar o enviar dinero sino para invertir, los intermediarios cobran varios tipos de comisiones por operar con bitcoins:
- comisión de transacción: cada intermediario la fija, entre 0.2% y 3%.
- comisión de depósito de fondos: si lo haces con tarjeta, por ejemplo, no es un gasto menor y varía mucho según el método de pago.
- comisión de retirada de fondos: al convertir los bitcoin en moneda fiat algunos intermediarios aplican comisión por su parte a la que pueden sumarse comisiones de tu banco. También se aplica si cambias los bitcoins a otras criptomonedas.
- comisión de cambio de moneda: si depositas euros en un intermediario que sólo acepta dolares soportaras una comisión de cambio. Para evitarlo usa un intermediario que acepte directamente tu moneda.
Estas comisiones son difíciles de calcular y en parte sólo son accesibles una vez creada la cuenta en el intermediario. Conduzcan con cuidado.
El mayor problema no son tanto las comisiones sino el historial de malas prácticas que acumulan los exchange o intermediarios. Estás son algunos de los trucos que usan descaradamente:
- wash trades — operaciones de un operador consigo mismo para crear volumen e influir en el precio, como se ha denunciado en Bitfinex.
- spoofing — ordenes de compra o venta enormes para simular un momento de optimismo o pesimismo que se cancelan según vaya afectando al precio. Esta práctica se ha denunciado en Coinbase y otros.
- painting the tape — como wash trades pero con múltiples participantes. Mark Karpelès reconoció ante un juez que usaba esta técnica en el exchange Mt. Gox.
- front-running — donde un operador es capaz de colar su orden antes que la de los clientes en momentos propicios.
No es posible enfatizar bastante lo poco riguroso de las medidas de seguridad de estos intermediarios cuando no se dedican directamente a manipular el mercado. Sin la vigilancia de autoridad alguna, el principal exchange del momento llamado Mt Gox se hundió en 2014 perdiendo todos los bitcoins (850,000 bitcoins). La teoría más aceptada es que sufrieron robos masivos de sus criptomonedas por no tener medidas de seguridad adecuadas. En 2016 pasó lo mismo con el exchange australiano Igot y podríamos hacer una interminable lista con incidencias de estas empresas.
Es difícil pensar que estas malas prácticas desaparecerán sin regulación.
Bitcoin no puede ser un depósito de valor
Las monedas que diariamente usamos, el euro o el dólar, son un depósito de valor. Esto significa que tengo confianza en que si guardo 3.000 euros en casa un año después esos euros tendrán un valor muy parecido al inicial. Si mi sueldo está en euros sé - con poca variación - qué cosas podre comprar con él en el futuro cercano.
Una criptomoneda que aspira a sustituir al dólar no puede tener caídas del 30% en una semana, como acaba de pasar. Tuvo caídas del 93% en 2011, del 70% en 2013 o del 86% en 2014 (dejando aparte los primeros años donde la montaña rusa era continua). Y no puede multiplicar su valor en un año sin dañar la economía. Ni las monedas tradicionales más disfuncionales llegan a estos extremos. Imaginemos lo que debe pensar el señor de Florida que compró 2 pizzas por 10.000 bitcoins en 2010.
Nadie va a usar una moneda para las transacciones diarias si su valor es errático. Sin estabilidad nadie va a pedir un préstamo en esa moneda ni la usará para hacer compras.
Un mundo con bitcoin
Hasta bien entrado el siglo XX las monedas tradicionales estaban condicionadas al patrón oro: todo el dinero en circulación estaba respaldado en alguna cámara acorazada del gobierno por lingotes. La oferta de oro es limitada y esto provocaba que durante las crisis cíclicas que ocurren en el capitalismo los gobiernos apenas podían actuar puesto que no podían imprimir más dinero que el oro que había.
El fin de la Primera Guerra Mundial supuso que los gobiernos se saltaran este patrón ante las enormes deudas acumuladas en la guerra que no podían respaldarse con metal precioso, de ahí se pasó a los acuerdos de Breton Woods y finalmente en 1971 Estados Unidos decidió abandonar por completo el patrón oro.
Las monedas actuales no están respaldadas directamente con nada más que la confianza en la propia moneda y esto permite a los gobiernos las grandes intervenciones sobre la economía, como la que hemos vivido recientemente en la crisis inmobiliaria de 2007. El sistema actual es muy imperfecto pero permite que los bancos centrales controlen el crédito o la estabilidad de los precios expandiendo o contrayendo la cantidad de dinero en el mercado.
Una economía mundial basada en bitcoin sería volver al patrón oro, es decir a la oferta rígida de moneda, dado que esta criptomoneda dejará de producirse cuando alcance la cifra de 21 millones de bitcoins. El 80% del total de bitcoins ya ha sido extraído por los mineros y la dificultad de su extracción crece de manera exponencial (cada vez el crecimiento en número de bitcoins es más lento, se ha diseñado así el sistema).
El uso universal de bitcoin significaría despojar a los gobiernos de política monetaria y de poder contraer y expandir la masa monetaria cuando lo necesiten, olvidando la lección que aprendimos en la Gran Depresión. El creador de Bitcoin explicó en 2008 en un paper que bitcoin eliminaría la inflación. Por eso bitcoin atrae a los gold bugs y todo aquel contrario a la intervención del gobierno en la moneda.
Vivimos una contradicción en la que cada vez más voces piden eliminar el dinero físico (usar moneda como la actual pero sólo tarjetas y transferencias) para combatir el fraude fiscal y las actividades delictivas y a la vez se da credibilidad a bitcoin que hace más difícil aún vigilar las transacciones. Suecia está haciendo avances para reducir la porción de su economía que se realiza en efectivo. España limita cada pocos años el dinero que puedes pagar en metálico por transacción obligando a identificarte de manera electrónica. ¿Cómo es esto compatible con una moneda que no deja rastro de quién emite y recibe una transacción? ¿Cómo ayuda esto a la lucha contra el fraude y el delito? ¿Cuántos inversores en bitcoin cumplen con el fisco?
También se habla del desastre ecológico. Estamos emitiendo a la atmósfera entre 8.000 y 13.000 kilogramos de CO2 por cada bitcoin extraído en principalmente granjas chinas cuya electricidad proviene del carbón. Ineficiente aunque haya gente que le busque aplicaciones creativas.
Pero blockchain está de moda: los smart contracts
Lo más original de bitcoin es blockchain que, en mi opinión, es la innovación que quedará después de que se pase la moda de bitcoin. Queriendo resaltar la originalidad de la propuesta (contabilidad distribuida, tolerante a fallos, muy difícil o imposible de falsificar, etc) quiero también remarcar que se está intentando aplicar a todo como una moda más que como una solución. Voy a poner un ejemplo de los smart contracts.
Los smart contracts son contratos escritos en software en vez de usar un texto legal que son incluidos en blockchain para que sea conocido por todas las partes e infalsificables. Pueden incluir reglas para transferir dinero sin el consentimiento "manual" de las partes siguiendo unas reglas preestablecidas. Su ventaja teórica es que son autoejecutables y no requieren abogados revisando el funcionamiento ni hay disputas posibles.
Un ejemplo del mundo real de cómo esto puede ser problemático para muchos casos de uso es The DAO (Distributed Autonomous Organization), un vehículo de inversión donde los inversores usando sus claves criptográficas votan qué inversiones hacer prescindiendo de los gestores y por tanto las comisiones por gestión. Nos hemos ahorrado al intermediario.
Este sistema invirtió 50 millones de dolares en un fondo de inversión controlado por un programador que conocía el sistema y aprovechó unos dicen que un bug otros que una característica del sistema en su favor. Tras esa inversión cuestionable algunos inversores aseguraron haber sido robados y otros que todo el valor del sistema DAO es la autonomía de su operación y que supervisarlo sería acabar con el sentido del fondo. El autor del "hackeo" hizo público un comunicado con la siguiente declaración:
"Estoy decepcionado al comprobar que algunos llaman "robo" al uso que he hecho de una característica del sistema. Yo estoy haciendo un uso explícito de algo que se recoge en el smart contract y mi abogado me ha dicho que lo que he hecho es legal. Si lo desean pueden revisar los términos del contrato DAO."
El autor se estaba riendo del concepto "el código es la ley". Al final se decidió intervenir el sistema y retroactivamente cancelar la operación. Normalmente las transacciones que implican mucho dinero tienen un humano supervisando por una razón válida.
Tras esta puntualización creo que blockchain puede traernos innovaciones interesantes tras esta fase experimental y tiene valor a largo a pesar de algunas de sus aplicaciones como bitcoin.
¿Entonces si sé lo que hago puedo invertir?
Bitcoin sube con fuerza porque tiene dos tipos de inversores: los que invierten de manera especulativa y por otra parte los que invierten a largo plazo porque creen que bitcoin es el medio de pago del futuro.
Para los que especulan - muchos se han hecho ricos - Bitcoin es una apuesta con un alto riesgo pero con gran recompensa. Con la entrada de bitcoin en el mercado de derivados también se puede apostar a la baja. Si sabes lo que haces no tengo nada que decir.
Si eres un inversor a largo que crees en bitcoin después de todo lo que he puesto arriba sólo te aconsejo que tengas las criptomonedas en tu poder con un wallet hardware y que no inviertas lo que no te importa perder porque no somos pocos los que pensamos que el bitcoin no tiene ningún valor en el largo plazo y es impredecible en el corto.
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La noticia Por qué no voy a invertir en bitcoin ni en criptomonedas fue publicada originalmente en Xataka por huyelobo .
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